La Plaza de San Agustín (conocida popularmente como Placeta de las Agustinas) es rectangular, posee árboles, bancadas y una fuente.
Rodeada por el Convento de las Agustinas como la de la casa de los marqueses de Montortal y su bodega y de la Casa de Cultura es uno de los lugares más significativos de Almansa. Todos estos edificios dan a la calle Aragón, antiguo camino de Aragón o Ayora que comunicaba Levante con la Meseta peninsular.
Hay que resaltar las vistas del Castillo que se observan desde ahí.
Es importante destacar la creación de la plaza que da al convento que fue denominada de San Agustín y, popularmente, conocida como Plaza de las monjas. Este espacio de planta casi cuadrada no se formó con un plan, de esta manera la edificación del nuevo convento en el siglo XVIII, junto a la casa-palacio de los marqueses de Montortal y su bodega dan lugar a la plaza que vemos hoy. Actualmente la plaza de San Agustín no presenta el mismo aspecto que tenía cuando se creó, de hecho se encuentra elevada sobre el nivel de la calle que en algunas zonas alcanza más de un metro de altura. En torno a 1980 se realizó una reforma llevada a cabo por el Ayuntamiento. Fue una mala intervención ya que no se estudiaron los problemas que podía ocasionar el levantamiento. Como consecuencia de esto se produjo una pérdida de la visión directa de todo el conjunto del edificio agustiniano y un ocultamiento de todo el basamento de la obra. Además, en la casa de los marqueses de Montortal se han producido humedades y una merma del tamaño de las ventanas a ras del suelo que iluminan las bodegas del edificio. No se conserva ningún proyecto donde aparezca reflejado esta intervención por lo que no hay una constancia oficial del motivo de la obra. Algunos funcionarios municipales cuentan que en aquel entonces la plaza se encontraba en malas condiciones debido a que las raíces de los grandes árboles sobresalían por encima del suelo y constituían un gran peligro. Lo cierto es que con esta
actuación se desvinculó la fachada de la iglesia con la plaza y con el resto de edificios adyacentes, rompiéndose con el único ejemplo de plaza del siglo XVIII que quedaba intacta en la ciudad de Almansa.
En la actualidad se encuentra instalada en el centro de la misma una fuente de hierro que sustituye a un antiguo monolito que se encontraba en este mismo lugar. Dicha fuente se ha ubicado en varias plazas públicas de Almansa hasta llegar finalmente a la plaza de San Agustín en la segunda mitad del siglo pasado. A principios del siglo XX la fuente se encontraba en la plaza de la Constitución, a escaso metros del antiguo Ayuntamiento.
Por la plaza de San Agustín pasaba la acequia de agua que iba dirección a los huertos del convento, de esa manera se autoabastecía la comunidad.
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