Aunque se conoce popularmente como el Convento de Los Franciscanos, el templo está dedicado a Santiago Apóstol, ya que a él estuvo consagrada la primitiva ermita franciscana.
La Archicofradía de la Real e Ilustre Esclavitud de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Medinaceli de Almansa, fundada en el año 1956, tiene su sede canónica en este convento.
Desde principios del siglo XXI el convento está deshabitado.
Arquitectura
El convento es una sencilla construcción de estilo barroco, levantada en el siglo XVII.
La iglesia, adosada al propio convento, es sobria, de planta rectangular y con capiteles laterales. Aneja a ella, al lado de la epístola, hay una amplia capilla con exuberante decoración en barro.
Encima de la puerta de entrada al templo aparece, tallada en piedra, la inscripción del año 1660.
Su estructura se asemeja a las iglesias coloniales que los españoles construían, por estas mismas fechas, en Hispanoamérica.
Arte
En una de las capillas laterales existe una imagen de san Pascual Bailón, obra de Roque López, discípulo de Salzillo, tallada en 1804.
Parece ser que el santo, que había ingresado en la orden franciscana en 1564, estuvo durante algún tiempo en el convento almanseño.
Historia
El convento fue fundado por Fray Antonio de Llerena, el 16 de noviembre de 1563, en torno a la ermita de Santiago, junto a cuyos muros, y durante los dos años siguientes, se llevaron a cabo las obras necesarias para acoger a los religiosos, unas dependencias de gran austeridad como mandaba la regla de los franciscanos descalzos.
En 1637 comenzaron las gestiones para trasladar el convento a su actual emplazamiento, un huerto que el síndico del convento, don Marcos de Navarra, había comprado en el Cerrado. El Concejo, dominado por los Galiano, que estaban enfrentados aviesamente con los Navarra, se opuso al cambio de emplazamiento.
En 1644 todavía se le ponían trabas e inconvenientes. Por fin, en 1645 se establecieron las condiciones y se firmaron los capítulos del traslado, que fueron aprobados definitivamente en agosto de 1646.
Las obras comenzaron hacia 1660 para finalizar tres años después. De hecho, los Navarra, o Enríquez de Navarra, siempre mantuvieron muy buenas relaciones con los franciscanos. Algunos de ellos dejaron dispuesto en su testamento su deseo de ser enterrados vistiendo hábito franciscano.
Tras la prohibición de llevar a cabo enterramientos en la iglesia de la Asunción, y hasta la construcción del cementerio, fueron muchos los sepultados en la capilla de Santiago de este convento.
Con la desamortización, el convento fue clausurado el 23 de enero de 1836, aunque su iglesia continuó abierta al culto. En 1842 el Estado lo cedió gratuitamente al Ayuntamiento por 50 años.
En sus dependencias funcionaron la Academia de Música y unas Escuelas Públicas, que fueron desalojadas en 1899 por su estado ruinoso. Hacia 1900, realizadas algunas reformas, fue ocupado por una comunidad de franciscanos repatriada de Filipinas, que lo abandonó hacia 1921.
Un año después pertenecía a la Provincia de Cartagena. En 1931, al poco de instaurarse la II República, los frailes fueron expulsados. En las dependencias conventuales se establecieron aulas de las Escuelas Graduadas de Primera Enseñanza del Grupo Cervantes.
Durante parte de la Guerra Civil su iglesia sirvió como garaje de las Brigadas Internacionales. Hacia 1940 regresaron los frailes.
En la década de los sesenta, la iglesia de Santiago de los Padres Franciscanos funcionó como parroquia hasta la edificación de la iglesia de San Isidro.
Galería
Ubicación
Calle San Francisco 12d, 02640 Almansa, Provincia de Albacete, España
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