Fue parte del Monumento a los Caídos por Dios y por España, inaugurado el 7 de mayo de 1947, pero no se ubicó aquí sino junto al Castillo.
Sobre un graderío de cuatro escalones de 0,18 m (0,72 m en total) se alzaría un pedestal de mampostería de 11 m adosado a la roca, y sobre éste se levantaría una cruz de 5 m de altura y un brazo horizontal de una longitud total de 3,40 m. Dicha cruz estaría fabricada con 5m3 de hormigón armado, forrado con 34 m2 de chapado de losas de piedra natural de Bateig de 4 cm de espesor. Ello conferiría al conjunto una altura total de 16,72 m.
En otoño del año 2005 el gobierno representado por Antonio Callado, decidió trasladar este monumento al cementerio.
En la actualidad observamos este monumento, sin tumba alguna, junto al altar de piedra arenisca.
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